Si en tu comunidad de vecinos o en tu casa de Madrid tenéis en mente poner toldo en ventanas o terrazas, tenéis que evaluar las ventajas de los toldos con cofre. Además de la cuestión estética, el gran punto a favor de este sistema es que tanto la lona como la estructura metálica quedan totalmente recogidas y por tanto protegidas de las inclemencias del tiempo y de la suciedad. Con esto se consigue alargar la vida útil del toldo y reducir su mantenimiento. Te contamos a continuación qué tipos de toldos cofre hay y para qué casos son más apropiados:
Toldo con cofre de punto recto
Es un toldo clásico, con la ventaja de que se puede regular su inclinación hasta 180º en función de la necesidad de sombra. Así, la lona queda prácticamente a ras de fachada. Es una buena opción para días soleados pero ventosos o si se busca la máxima intimidad. El toldo con cofre de punto recto cuenta con un cofre metálico en donde se enrolla la lona, que queda resguardada a la perfección, hasta el punto de que el cierre evita por completo la entrada de agua o residuos. Es muy estable contra el viento al contar con brazos de tensión, que aportan firmeza y sujeción.
Toldo con cofre extensible
Es una opción muy discreta para la fachada cuando se trata de proteger una terraza en Madrid o un balcón. Con este sistema es posible recoger completamente los brazos articulados del toldo en el cajón de aluminio o cofre para su total protección, además de para respetar al máximo la estética de la edificación.
Toldo con cofre vertical
La mejor alternativa para cubrir ventanales y acristalamientos. Solo se desenrollan cuando es necesario que cumplan su función. Además, también sirven como elemento decorativo. Al guardarse la lona en su totalidad en el cofre, queda liberada la fachada a la vista. Es la opción más adecuada para el aislamiento en invierno y para mantener un aspecto limpio y minimalista.
Sin duda, las grandes ventajas de los toldos con cofre es que pasan desapercibidos y que son duraderos, puesto que una vez recogidos, sus elementos quedan protegidos del desgaste y de la corrosión. A esto hay que añadir que, como con el resto de soluciones de sombra, los toldos con cofre se pueden motorizar. También se les puede incluir un sensor de lluvia/viento y elegir sistemas de domótica para controlarlos cómodamente desde el móvil.
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